Practicar la compasión en los desacuerdos en toda la Iglesia

Tus preguntas [from the MSMC Ministerial Council] han estado dando vueltas en mi corazón y en mi cabeza durante los últimos días, y han generado un buen número de reflexiones y nuevas preguntas.

En la Iglesia en general, y en todo el país, parecemos atrapados en una agitación divisiva que nos ha dejado emocionalmente deshilachados y, sin duda, frustrados, independientemente del bando al que pertenezcamos.

Desgraciadamente, estos desafíos divisivos tienden a expresarse de formas que serían difíciles de describir como bondad amorosa. Más bien tienden a la defensiva, a la culpabilización, a la polarización creciente y, en ocasiones, a una dolorosa deshumanización, y esto se experimenta en todos los bandos.

Sus preguntas encierran una paradoja desafiante: la necesidad de tomar una decisión sabiendo que no existe una respuesta perfecta que atienda a los profundos sentimientos de todas las partes de esta cuestión y que, al mismo tiempo, muestre respeto y honor…